Me formo en la fila de una de las cajas esperando mi turno y delante de mi estaba una gorda (así les digo yo a las nenas, no es de forma despectiva es de cariño) de buen ver, en eso se le acerca otra y le dice:
gorda2: Ya vas a pagar?
gorda1: Si
gorda2: espera te encargo esto (chingo de productos)
Yo como soy un caballero le dije no hay pedo adelante no llevo prisa, pero resulta que llegaron otras 3 gordas y empiezan a pasar sus productos a la gorda2 y ésta a la gorda1, ahí fue cuando pensé -está bien que mamen pero no se lleven la vaca- las deje vaciar su carrito y justo cuando se disponían a pasar bien contentas ellas, que las detengo y les digo que era una falta de respeto para mi y la demás gente que estaba esperando su turno, que si tenían un poco de educación esperaran su turno y les pedí muy amablemente que retiraran sus productos porque iba a poner los míos (mis artículos claro), una de ellas replico diciendo que tenían prisa porque en la escuela les daban poco tiempo para comer y la chingada, no es suficiente para mi tu argumento, mejor administra mejor tu tiempo -le conteste- muy firme en mi postura de no quitarme la demás gente al ver el hecho me apoyó y a las gordas no les quedo más remedio que regresar sus cosas al carrito y esperar su turno.
La imagen que pongo al principio en realidad es la que se muestra a continuación, el personaje es Jules Winnfield (interpretado por el maestro Samuel L. Jackson en la pelicula Pulp Fiction).
Incongruencia es mi segundo nombre...
2 Comentarios:
No mams....., imagino que entonces no debieron estar tan ricas, de lo contrario valiendote madr... les hubieras dejado el lugar,digo para al menos recorrerlas de arriba a abajo con una mirada lasciva.
gracias por el artículo, muy interesante!
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